Beneficios de salud de ir verde

¿Podría la habitación de su pequeño estar enferma?

Todos los padres sueñan con crear un entorno seguro y hermoso para su pequeño, pero cuando se trata de criar niños sanos y felices, a veces solo la madre sabe mejor: la madre naturaleza es así. Como todas las buenas madres, la buena y vieja mamá tiene una manera de saber qué es bueno para nosotros, y productos químicos peligrosos, como el formaldehído, por ejemplo, pero no lo hagas.

Bastante gracioso, los expertos están de acuerdo.

Un número creciente de investigadores y profesionales médicos afirman que los productos químicos sobrantes del proceso de fabricación de muchos artículos domésticos comunes pueden agravar las condiciones médicas existentes e incluso causar problemas de salud nuevos y potencialmente peligrosos, especialmente en niños pequeños.

En otras palabras: los artículos de uso diario que se encuentran en la habitación de su hijo podrían enfermarlos.

Peligros Ocultos

La Agencia de Protección Ambiental advierte que la pintura, los muebles nuevos, las alfombras, los colchones, los vendajes e incluso los juguetes pueden contener toxinas desagradables llamadas compuestos orgánicos volátiles ( VOC) . Muchos de estos productos químicos se evaporan con el tiempo pero, en el proceso, crean humos que pueden comprometer la salud de su hijo.

Según la EPA, los humos resultantes de compuestos orgánicos volátiles pueden irritar los ojos, la nariz y la garganta; desencadenar dolores de cabeza, mareos y náuseas; e incluso puede dañar el hígado, los riñones y el sistema nervioso central. ¡Cosas de miedo! (Otros estudios incluso han vinculado la liberación de gases químicos a SIDS, aunque la conexión no ha sido probada).

Los VOC pueden resultar especialmente peligrosos para los niños que sufren de alergias y asma. De acuerdo con el Colegio Americano de Alergia, Asma e Inmunología, la exposición a COV puede causar reacciones alérgicas severas en niños y adultos con alergias, desde irritación de la piel hasta problemas respiratorios.

Aquellos que sufren de asma son particularmente vulnerables. El ACAAI identifica los VOC como un factor de riesgo significativo para la afección, lo que explica que la exposición debilita el sistema respiratorio e incluso puede desencadenar ataques de asma potencialmente mortales.

Como si los efectos potenciales de la exposición a los compuestos orgánicos volátiles no fueran suficientemente atemorizantes, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han determinado que los niños pueden ser incluso más susceptibles a los peligros ambientales que los adultos. Según el CDC, los VOC y otros contaminantes del aire interior representan una mayor amenaza para los bebés y niños pequeños, que inhalan y absorben más productos químicos en proporción a su pequeño tamaño corporal que los adultos. Además, debido a que los niños experimentan su entorno de manera diferente que los adultos, exploran cosas con la boca y pasan la mayor parte del tiempo en el piso, es más probable que entren en contacto directo con peligros potenciales, exponiéndolos a concentraciones más altas de contaminantes químicos que los adultos.

Beneficios orgánicos

Si bien puede ser imposible eliminar por completo los VOC y otros peligros del entorno de su hijo, puede limitar su exposición a ellos.

Los productos ecológicos y ecológicos están ampliamente disponibles y son más elegantes y asequibles que nunca.

Producidos sin la ayuda de productos químicos, los productos orgánicos no tienen residuos químicos y no producen humos peligrosos. Al elegir materiales orgánicos para su cuarto de niños o su casa, puede reducir los contaminantes químicos, mejorando la calidad del aire que respira su familia: una opción saludable tanto para sus hijos como para el medio ambiente.

Por supuesto, eso no significa que tenga que eliminar todo en la habitación de su pequeño y comenzar de cero. Si está comenzando un nuevo proyecto, como la primera guardería del bebé, intente comprar tantos artículos orgánicos como sea posible. De lo contrario, considere intercambiar algunos artículos, como moquetas o muebles de fibra de madera, y reemplace el resto según sea necesario. Si su hijo sufre de alergias o asma, elija ropa de cama naturalmente hipoalergénica y orgánica y un colchón orgánico.

Recuerde, cada cambio realizado es un cambio para mejor.