¿Con qué frecuencia deben mojarse los pisos?

Frecuencia y método para trapear pisos

Mantener los pisos limpios en su hogar es un proceso interminable. No importa cuán limpios tratemos de ser, la suciedad entra a nuestras casas, y cuando lo hace, es necesario limpiarla para expulsarla.

Con qué frecuencia fregar los pisos

Las áreas de alto tráfico necesitan el trapeado más frecuente. Para la mayoría de las familias, las áreas de alto tráfico incluyen la entrada, la cocina, los baños y los pasillos. Cualquier área de alto tráfico en su hogar debe limpiarse con agua una vez a la semana.

Las habitaciones de su hogar que no se usan con frecuencia, como las habitaciones de huéspedes, no necesitan ser limpiadas semanalmente. Trapear cada dos semanas o mensualmente debería ser suficiente.

Excepciones

Por supuesto, hay excepciones. Si tiene perros, es posible que necesite fregar más a menudo para deshacerse de las huellas de barro. Si varios niños regularmente habitan en su cocina para comer, es posible que sea necesario limpiar los restos de comida. Fregar tantas veces como sea necesario en circunstancias especiales como estas.

Formas de extender el tiempo entre tragos

La frecuencia de su trapeador se determina por la frecuencia con que se necesita. Una forma de prolongar el tiempo entre el arrastre de la fregona, el cucharón y los guantes de goma es aplicar un trapeador seco sobre las áreas problemáticas a diario. Estas mopas secas, a menudo cubiertas con tela de microfibra, recogen arena, pelo de mascotas, polen y otros restos pequeños del suelo. Al pasar solo unos minutos al día, puede dejar el trapeador húmedo hasta que ocurra un derrame o acumulación de suciedad.

Cómo fregar tus pisos

Cuando llegue el momento de mojar sus pisos mojados, necesitará una esponja o trapeador, una cubeta, un limpiador suave, guantes de goma y una almohadilla de nylon para fregar. Sigue estos pasos generales:

  1. Barra o aspire el área para recoger partículas grandes.
  2. Limpie cualquier área húmeda en el piso antes de fregar, como huellas de barro todavía húmedas.
  1. Llena una cubeta con agua tibia y una pequeña cantidad de limpiador.
  2. Comience en la esquina más alejada de la habitación y avance hacia la salida de la habitación para no tener que caminar sobre superficies recién lavadas.
  3. Sumerja la fregona en el balde y escúrrela. No quieres una fregona extremadamente mojada. Las áreas que trapeas deben secarse rápidamente.
  4. Use trazos de ida y vuelta comenzando en la pared y moviéndose hacia el centro de la habitación y hacia la salida. Cubra cada área dos veces.
  5. Cuando encuentre una marca de desgaste, use una almohadilla de nylon para quitarla con la mano.
  6. Después de cada pocos pasos, enjuaga la fregona en el cubo, escúrrelo y sigue fregando.
  7. Si el agua se pone turbia mientras trapea, reemplácela. No quiere volver a aplicar tierra al piso.
  8. Para finalizar, trapear una vez más con agua limpia y sin detergente para eliminar las soluciones de limpieza que puedan quedar en el piso.