Cómo limpiar y cuidar un piso laminado

El piso laminado es relativamente fácil de cuidar debido a su capa de desgaste superficial. Esta es una capa invisible que descansa sobre la cara decorativa del material, protegiéndolo de manchas, daños y penetración de líquidos. Debido a esto la mayoría de los líos se pueden limpiar, y el mantenimiento regular consiste en cuidar esa superficie de protección.

Proceso regular de limpieza de pisos laminados

1. Debe comenzar por barrer o pasar la aspiradora por el piso para eliminar completamente la suciedad o los residuos sueltos.

Esto es algo que debe hacerse regularmente solo para mantener la capa de desgaste.

2. Luego, aplique un limpiador de piso laminado apropiado a una pequeña sección del piso directamente. Solo unas pocas gotas deberían ser suficientes. Si no tiene un agente limpiador laminado específico, entonces el jabón para lavar platos será suficiente.

3. Sumerja la fregona en un cubo de agua limpia y humedezca un poco. Luego, debe escurrir bien el trapeador para que quede ligeramente húmedo. Demasiada agua puede dañar el piso laminado que está tratando de limpiar.

4. Pase el trapeador sobre el lugar donde dejó caer el agente de limpieza, asegurándose de moverse con el grano y colocar el material. Será importante usar una mopa de microfibra gruesa de buena calidad con una almohadilla extraíble.

5. Una vez que se haya completado la primera sección del piso, enjuague el trapeador con agua limpia y fresca, y luego escúrralo hasta que esté ligeramente húmedo nuevamente. Luego, vierta un poco más de limpiador en otra sección del piso y continúe con el proceso.

6. Mientras trabajas, asegúrate de no terminar con agua estancada en el piso en ningún momento. Si se forman charcos de líquido, límpielos inmediatamente con un paño o toalla limpios.

Evite los siguientes agentes al limpiar un piso laminado:

Alternativa de limpieza de pisos laminados naturales

Para un agente de limpieza de pisos laminados hecho completamente de ingredientes naturales que probablemente ya estén en la casa, mezcle partes iguales de vinagre blanco, agua y alcohol. El vinagre es un poderoso limpiador natural, y el alcohol para frotar ayuda a que la solución se evapore más rápido.

Eliminación de manchas de suelos laminados

Manchas de grasa: coloque un paquete de hielo sobre la grasa hasta que se endurezca. Luego, use una cuchara de plástico o un cuchillo de mantequilla para quitar la grasa seca. Una vez que se ha eliminado el volumen, se puede rociar con un limpiador de ventanas para eliminar el resto de la mancha.

Marcas de lápices de colores: Tome un paño suave y limpio, y humedezca con esencia de trementina o alcohol mineral inodoro. Luego frote la tela en la mancha para eliminar los colores del crayón. Si es necesario, use un segundo o tercer paño limpio para levantar el exceso en lugar de untarlo con el original.

Manchas de sangre: para eliminar la sangre de un piso laminado, rocíe la mancha con limpiacristales y luego límpiela vigorosamente con un paño de algodón limpio.

Derrames de tinta: Un trapo húmedo y tibio y una pequeña cantidad de detergente para platos deberían ser suficientes para eliminar la mayoría de las manchas de tinta del piso laminado. Si eso falla, entonces se puede emplear un removedor de tinta comercial para obtener resultados más fuertes.

Goma: Use un cuchillo o tenedor de plástico para eliminar la mayor cantidad posible de chicle del piso laminado. Se puede usar un paquete de hielo para solidificar el material a fin de facilitar su eliminación. Luego, el resto se puede limpiar con un paño humedecido en alcohol mineral.

Instrucciones de cuidado regular para pisos laminados

La capa de desgaste de un piso laminado hace la mayor parte del trabajo de mantenimiento, protegiendo el material de manchas e imperfecciones. Su trabajo principal será cuidar esa capa barriendo o aspirando regularmente el piso para evitar que la suciedad y la pequeña suciedad salgan de su superficie. De lo contrario, estas diminutas partículas pueden actuar como arenillas que desgastan la capa protectora y exponen los materiales vulnerables a continuación.

Otras precauciones incluyen mantener alfombras o alfombras en las entradas de la sala para evitar que se filtre la suciedad.

Instalar almohadillas debajo de las patas de los muebles también puede ayudar a prevenir arañazos en la superficie del piso. Si se producen abolladuras o daños, puede intentar retocarlos con los kits de reparación de laminados.